La seguridad de la información, como concepto incluido en la norma ISO 27002, se basa en tres pilares: la disponibilidad, la integridad y la confidencialidad.
- Confidencialidad: Información accesible solo para personal autorizado. La información no debe llegar a personas o entidades que no estén autorizados.
- Integridad: Información correcta sin modificaciones no autorizadas ni errores. Se protege frente a vulnerabilidades externas o posibles errores humanos.
- Disponibilidad: Acceso a la información cuando se requiere, teniendo en cuenta la privacidad. Evitar “caídas” del sistema que permitan accesos ilegítimos, que impidan el acceso al correo…
Además puede abarcar otras propiedades como:
- Fiabilidad: probabilidad de que un sistema se comporte tal y como se espera de él.
- Autenticación: Información procedente de un usuario que es quien dice ser. Se verifica y se debe garantizar que el origen de los datos es correcto.
- No repudio o irrenunciabilidad: permite probar la participación de las partes en una comunicación. Existen dos posibilidades:
- No repudio en origen: el emisor no puede negar el envío. Ejemplo: se recibe un mensaje a través de Whatsapp por conexión cifrada y segura.
- No repudio en destino: el receptor no puede negar que recibió el mensaje porque el emisor tiene pruebas de la recepción. Ejemplo: en el mensaje de Whatsapp anterior, hemos observado el doble check al llegar y el cambio a azul si lo lee.