Caso práctico

—Bueno Juan, puesto que ya tenéis todos los elementos instalados, ya podemos trabajar más tranquilos.
—En absoluto María. Primero por que la seguridad 100% no existe y segundo por que todavía quedan por establecer los permisos de acceso sobre los recursos de nuestros sistemas.
—Uff, y yo que pensaba que ya estaba todo listo. Y esto último que indicas, ¿para qué sirve?.
—Para que no sea un caos y todo el mundo pueda cambiar cosas donde no debe. Es conveniente que en cada zona tengamos distintos permisos. Además, es fundamental llevar a la práctica distintas políticas de seguridad en las distintas zonas de acceso a la red.