
Cuando descargas aplicaciones móviles, en el proceso de instalación se indican a qué tipos de datos necesita acceder. Es importante prestar atención a esto, puede ser delicado incluso inseguro en casos particulares. Alguno de estos tipos de datos pueden ser:
- Lista de contactos de teléfono y de email.
- Registro de llamadas.
- Datos transmitidos por internet.
- Información del calendario.
- Datos de localización del aparato.
- Código de identificación exclusivo del aparato.
Cabe destacar que algunas aplicaciones solamente pueden acceder a los datos necesarios para su funcionamiento. Otras pueden acceder a otros datos pero sólo con autorización (permisos).
En la mayoría de los Sistemas Operativos, existe la posibilidad de leer las autorizaciones antes de instalar una aplicación, al leerlas podrás enterarte de algunos datos útiles que te pueden revelar cual es la información a la cual se podrá acceder por medio de la aplicación. Si no te convence, en muchos casos puede resultar más sensato buscar otras alternativas.
Habrás observado que, muchas aplicaciones, piden acceso a la ubicación del dispositivo. Esto se debe a que usan datos específicos de localización para ofrecerles mapas, cupones para tiendas cercanas, o información sobre alguien que tal vez conozcas y que se encuentre cerca.
Existen aplicaciones que suministran datos de localización a redes de publicidad que pueden combinarse con otra información almacenada en sus bases de datos para dirigir específicamente anuncios basados en sus intereses y su ubicación geográfica (Por ejemplo, Google o Facebook).
Para no permitir que las aplicaciones móviles accedan a sus datos de localización sólo debe desactivar estos servicios y dejará se estar visible (...o no).