Para entender mejor qué trataremos en los siguientes apartados, primero deberemos entender bien los conceptos básicos: ¿qué podemos entender por un fichero?
Un fichero es un archivo que contendrá un conjunto de caracteres o bytes que se almacenarán en el dispositivo en una ruta y con un nombre concretos.
Es el archivo que usará nuestro programa para almacenar, leer, escribir o gestionar información sobre el proceso que se esté ejecutando. Existen diferentes tipos de ficheros, como, por ejemplo:
- Fichero estándar: contiene todo tipo de datos (caracteres, imagen, audio, vídeo, etcétera). Normalmente son ficheros que contienen
información de cualquier tipo. - Directorios o carpetas: son ficheros que albergan más archivos en su interior. Su principal utilidad es mantener un orden o jerarquía en nuestros sistemas.
- Ficheros especiales: son todos esos ficheros que nuestro sistema operativo utiliza para controlar los dispositivos o periféricos de nuestro ordenador.
En este tema profundizaremos en el tipo de ficheros estándar y en los directorios. Este tipo de ficheros nos permitirán realizar diferentes acciones para tratar los ficheros y para mantener un orden y jerarquía con las carpetas.
Podemos destacar dos tipos de ficheros de datos:
- Los ficheros de bytes: también conocidos como ficheros binarios, son archivos que usan los programas para leer o escribir información. Incluso, los propios programas.
- Los ficheros de caracteres: también conocidos como ficheros de texto, nos permitirán leer o escribir la información que contengan ya que son una secuencia de caracteres. Su contenido se puede visualizar y modificar con cualquier editor de texto, como por ejemplo el bloc de notas en Windows o gedit en Linux.